Cumpliendo Moshé 120 años le comenta al pueblo de Israel que al no quedarle más días de vida, los exhorta a apegarse a Hashem, también Moshé le menciona a Yehoshua frente a todo el pueblo que él será el siguiente dirigente del pueblo, siendo el que cumplirá con la misión de llevar al pueblo de Israel hacia la tierra prometida.

Son encomendados con la Mitsvá de Hakhel, la cual consistía en que cada siete años durante la fiesta se Sucot se reunía todo el pueblo, hombres, mujeres y niños, para escuchar las palabras del rey de Israel al leer el libro de Debarim, reforzándoles su fe a Hashem.

Hashem le profetiza a Moshé que al fallecer Moshé, el pueblo va a cometer idolatría desatando Su furia, ocultando Hashem Su “Rostro”, por lo que le pide a Moshé el escribir una canción, la cual se refiere a la Perashá Haazinu, para que quede como testimonio de que estuvieron advertidos a eso, como siendo profetizado que la Torá nunca va a ser olvidada del pueblo de Israel.

Moshé termina de escribir el Sefer Torá entregándoselo a los Leviim pidiéndoles el colocarlo a un costado del Arón Hakodesh (Arca Divina).